Debut de un runner hipertenso en maratón

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Historia de un runner que debutó en la distancia del maratón a pesar de ser hipertenso, pero que siempre contó con asesoría profesional y siguió las recomendaciones de su médico. Logró el objetivo recientemente en el Maratón Medellín

Siempre fue un sueño, que empezó a forjarse con una gran dosis de sacrificio, venciendo los temores y fantasmas que siempre se asomaban, las madrugadas a entrenar en la fría Bogotá, mi condición de hipertenso, mi edad, mis obligaciones laborales, las fui derribando con la ayuda primero de Dios, mi familia, mi club Corre y Sueña y mi coach.

El proceso fue duro, la orientación del ‘capi’ Jesús fue clave, sus mensajes con los entrenamientos diarios, de estricto cumpliendo, no me daban opción de renunciar al objetivo, mi motivación era saber y creer que ellos me darían la fortaleza necesaria para cumplir con la distancia de la maratón.

En ocasiones quise renunciar y no salir a entrenar, preferir la comodidad de mi cama, en esos momentos encontraba fuerza y motivación en mi Dios y en la voz de mi esposa a mi lado diciéndome que esto no era fácil, de lo contrario lo haría todo el mundo.

Correr una maratón no es imposible pero si implica sacrificio, dolor y disciplina.

Cumplir el objetivo requiere no solo entrenar la parte física, sino alimentar y fortalecer el espíritu y la mente, incorporar una alimentación sana y balanceada, aprovechar cada cada kilómetro para meditar en la palabra, pidiendo a Dios la fuerza para no sucumbir ante dolor que se experimenta cómo una consecuencia normal del esfuerzo empleado.

Javier celebró en la meta con sus familiares y amigos del club con el que entrenó.

Puedo decir que la etapa más difícil de la carrera fué entre el kilómetro 30 al 36 dónde se puede resumir que viví un infierno en mi mente y en mis piernas, pero el imaginarme que en la meta me esperaban mi familia y los compañeros de Corre y Sueña inyectaron el combustible y la energía para lograrlo.

Gratitud total a Dios por qué siempre lo sentí a mi lado, al ‘capi’ Jesús por su insistencia y acompañamiento diario, a mi amada esposa por correr a mi lado desde su corazón, al club Corre y Sueña y a mis compañeros por sus recomendaciones y palabras motivadoras, a Elver Velásquez por ser mi parcero de entrenamiento, a Runningcolombia, medio colombiano especializado en atletismo por su apoyo incondicional y finalmente a mi hija Nathalia, orgullosa corredora de los 21K.

Javier Díaz – 42,195 km – 5 horas 11 minutos.