Entrevista de World Athletics a Anthony Zambrano, que reproducimos completa.
Anthony Zambrano emergió como un atleta de clase mundial en 2019, tras ganar la medalla de plata de los 400 metros en Campeonato Mundial de Doha, con récord suramericano de 44.15
En la parte final de nuestra miniserie de Doha a Tokio, pusimos el foco en el velocista colombiano de 23 años.
El mundo está preso de una pandemia global, entonces, ¿cómo se siente emocionalmente en este momento con miras en la temporada que se avecina?
Anthony Zambrano: Estoy muy feliz de poder volver a correr, mejorar mis tiempos, perseguir mis sueños y poner toda mi atención en los Juegos Olímpicos.
En 2019 dio un gran paso adelante en su carrera, ¿Qué factores contribuyeron a eso?
AZ: Fue el mejor año. Mi vida cambió por completo. Finalmente pude tener una casa propia, disfruté de un buen patrocinio, todo lo cual me llevó a una temporada enormemente exitosa.
Antes de la temporada 2019, ¿cuáles eran sus objetivos y expectativas?
AZ: Sabía que era fuerte. Comencé a entrenar con el entrenador (Nelson) Gutiérrez y armé un equipo adecuado a mi alrededor que creía en mis fortalezas.

¿Le sorprendió el récord nacional de 44.68 que estableció en La Chaux-de-Fonds en 2019?
AZ: Fue, obviamente, una sorpresa gratificante, pero sabía que era posible porque había disfrutado de una gran temporada competitiva en Estados Unidos en marzo / abril y mi entrenamiento había ido según lo planeado.
¿Qué recuerdos tienes de ganar el título panamericano 2019 y cuánta confianza te dio?
AZ: Sabía que estaba destinado a una medalla, ¡simplemente no sabía el color! Estaba mejorando constantemente mis tiempos y el microciclo de entrenamiento que hice antes de los Juegos Panamericanos me puso en la condición adecuada para desafiar el podio mientras nos propusimos correr alrededor de 44.60 (Zambrano ganó el título Panamericano de los 400 m, en Lima, con un tiempo de 44.83).
¿Cuáles fueron sus esperanzas y expectativas para el Mundial de Doha?
AZ: Esperaba estar en la final y mi esperanza era luchar por una medalla. Le debo un gran agradecimiento a mi equipo, mi entrenador, fisioterapeuta, gerente, agente, y al amor de mi familia y mi país, que pude ganar una medalla de plata.

Cuando Kirani James pasó volando por tu interior en la final del Campeonato Mundial, ¿qué pensaste? ¿Cómo mantuviste la compostura?
AZ: Tengo un profundo respeto por Kirani, es un atleta que he estudiado de cerca. En consulta con mi entrenador, discutimos una estrategia previa a la carrera que, si Kirani me adelantaba, lo siguiera de cerca y luego cambiara de ritmo en los metros finales. Trabajo duro todos los días en el enfoque mental para poder competir bien.
¿Cómo te sentiste en los últimos 100 metros de la final del Campeonato del Mundo? Estabas volando.
AZ: Esa es una parte importante de mi carrera, y como el grupo estaba dentro del alcance, ¡simplemente lo hice! En mi mente, cada sacrificio que hice en el entrenamiento, el dolor, los calambres musculares y las lágrimas ocasionales, valieron la pena en este momento. El combustible que necesitaba en esos últimos metros era solo imaginar la expresión de felicidad en el rostro de mi madre cuando recogí una medalla.
¿Qué significó para usted ganar la primera medalla en pista de Colombia en el Campeonato del Mundo y establecer un récord suramericano?
AZ: Felicidad extrema. Cuando estuve lesionado la mayor parte de 2017 y 2018, me dije a mí mismo que si me recuperaba, iba a poner todo el esfuerzo necesario para convertirme en el mejor atleta de Colombia. La medalla de plata y el récord suramericano es solo el comienzo de algo más grande.

Colombia también estableció el récord nacional de 2:59.50 para ubicarse en cuarto lugar en los 4×400 m en el Campeonato Mundial. ¿Qué tan especial fue este momento para ti?
AZ: Fue una gran sensación quedar cuarto en Doha y ganar el título Panamericano de 4x400m en agosto. No entrenamos juntos muy a menudo, pero sé que en un futuro cercano podremos producir resultados aún mejores.
¿Por qué Colombia es tan fuerte en 400 metros en este momento?
AZ: Porque pude superar muchas dificultades en mi vida y elegir sabiamente al mejor equipo que me rodea (entrenador, fisio, entrenador y agente). Eso me motivó todos los días a apuntar alto, a predicar con el ejemplo e inspirar a otros.

¿Cómo te cambió la vida ganar esa medalla?
AZ: Todo cambió. Después de Lima y Doha, pude comprarle una casa a mi mamá, comprar un auto, firmar nuevos acuerdos de patrocinio y crecer como persona. Si todo eso fue con una medalla de plata, ¡no puedo imaginar lo que sigue para mí cuando gane una medalla de oro!
Le das crédito a tu entrenador Nelson Gutiérrez y al fisio Caridad Martín que te alimentaron cuando no tenías nada. ¿Puedes explicarme más?
AZ: Conoces la calidad de un ser humano por su generosidad del corazón. Cuando no tenía ni un centavo en el bolsillo, zapatos para entrenar y muchas preocupaciones por las lesiones, casi me retiro del deporte. Pero tanto el entrenador Nelson como Caridad me abrigaron y me abrazaron como a un hijo. Compartieron sabiduría, cuidado y ayudaron a reconstruirme. Tenían total confianza en mí y me mudé a entrenar en Ecuador con ellos.