El estadounidense Ryan Crouser estableció, este sábado 27 de mayo, el récord mundial de impulsión de bala, con un registro de 23,56 metros, durante el Gran Premio de Los Ángeles de la USATF, la sexta reunión Gold del Tour Continental de Atletismo Mundial.
Su marca le suma 19 centímetros al récord mundial anterior de 23,37 m., que también estaba en su poder, desde el 18 de junio de 2021, cuando se llevaron a cabo los trials o selectivos de los Estados Unidos, en Eugene, para los Juegos Olímpicos de Tokio.
El campeón olímpico y mundial amenazó el récord desde el inicio de la competencia, a la abrir su serie con 23,23 metros, a 14 centímetros del anterior registro. En la segunda ronda siguió subiendo y marcó 23,31 m., a seis centímetros. En la tercera ronda llegó a 22,94 metros y terminó primero en la preclasificación, para poner más emoción a lo que venía.
Y llegó lo que se presagiaba, al lograr la marca de 23,54 metros en el cuarto turno. Presagiaba lo que había logrado. Alzó los brazos, pero la emoción y los aplausos llegaron cuando se conformó la distancia por parte delos jueces.
Y ya con el título del torneo y el récord mundial en sus manos, Crowser cerró su serie con 22,80 metros en el quinto y 22,86 metros en el sexto.