Una de las imágenes del Campeonato del Mundo de Atletismo Bajo Techo de Belgrado 2022 fue la derrota de Jakob Ingebrigtsen en la final de los 1.500 metros. El campeón olímpico en Tokio 2020 lideraba la prueba hasta los últimos metros, pero su remate en la recta final no fue suficiente para que el etíope Samuel Tefera lo sobrepasara y le quitara el oro. Jakob finalizó con un tiempo de 3:33.02.
Un hecho extraño tanto para el noruego como para los espectadores en el Stark Arena, escenario donde se disputó el mundial en la capital serbia. Si algo caracteriza a Ingebrigtsen es su ‘rush‘ final. Horas después de la plata puede existir una explicación, ya que el noruego anunció que una vez llegó a su casa, el resultado de su prueba para coronavirus dio positivo.
«Recién llegado a casa, en Sandness, decidí realizarme un control médico tras tener una sensación extraña por la noche. Liderando la carrera todo lo sentí normal, con una PCR negativa y varias pruebas rápidas. Ahora, es todo recuperar y volver a entrenar», comunicó Ingebrigsten a sus seguidores por medio de una publicación en redes sociales.

Atando cabos
Las declaraciones del ‘hijo del trueno’ han levantado algunas sospechas en retrospectiva. Una vez finalizada la carrera, Ingebrigsten expresó en una entrevista que estaba decepcionado del resultado, que aunque venía como el mejor, no se sentía bien y que tuvo sensaciones extrañas en la noche anterior a la prueba.
El atleta de 21 años fue uno de las grandes sorpresas en este mundial, al igual de lo extraño que sería si se confirma que el virus afectó el rendimiento de un deportista tan joven y preparado físicamente. Sin embargo, esta medalla de plata es su octava presea en grandes campeonatos junto a su oro olímpico, sus dos medallas doradas en el campeonato europeo y sus cuatro preseas (tres de oro) en el campeonato europeo bajo techo.
Con información de Marca