El maratón de Londres, tercer ‘major’ de la temporada tras haberse disputado los de Tokio y Boston, nos ha regalado dos grandes carreras y hasta un singular récord del mundo en una mañana primaveral en la capital británica. La protagonista de la plusmarca fue la etíope Tigist Assefa, que además se ha desquitado de su dolorosa derrota en el maratón olímpico de París ante Sifan Hassan.
Asefa venció con un tiempo de 2:15:50, que se convierte en récord del mundo en un maratón con salida exclusiva para las mjeres, registro con el que supera la marca de 2:16:16 que tenía la keniana Peres Jepchirchir, logrado igualmente en Londres, el año pasado.
La ex plusmarquista mundial en carreras mixtas, Tigst Assefa, y Sifan Hassan se volvían a ver las caras tras los apasionantes metros finales del maratón olímpico en París, en el que la neerlandesa batió a la etíope en una de las llegadas más icónicas de todos los tiempos. Junto a ellas, acompañadas por las dos primeras liebres, corrían la keniana Joyciline Jepkosgei, ganadora en Londres en 2021, y la etíope Megertu Alemu, segunda en 2023.
Con un tiempo agradable que auguraba buenas marcas, los primeros 5 y 10 kilómetros se pasaban, respectivamente, en 15:34 y 31:16 -a ritmo de 3.07 el kilómetro-, para una proyección final en torno a las 2:12. El récord de la carrera, que tiene la británica Paula Radcliffe con 2:15:25 desde 2003 (en carrera que fue mixta), parecía quedar en la historia, aunque el calor iba a apretar en los kilómetros finales y las liebres desaparecían demasiado pronto de escena.
La media maratón la pasaron en 1:06:40, con Hassan a 10 segundos de Assefa y Jepkosgei. Nada que la experimentada neerlandesa no pudiera recuperar. El asunto es que a la altura del kilómetro 25, que se pasaron en 1:19:14, la brecha entre las dos primeras y la campeona olímpica era ya de 26 segundos. Hassan, la mujer que había emulado al mítico Emil Zatopek con sus tres medallas en los 5.000 y 10.000 metros y el maratón de París 2024, estaba mostrando su rostro más humano.
De hecho, al paso de los 30 kilómetros –en 1:35:33- la victoria era ya cosa de dos, con Assefa y Jepkosgei aún mano a mano y Hassan a más de un minuto. La etíope, dos veces ganadora en Berlín y segunda en la capital británica el pasado año, no quería repetir la dolorosa experiencia de París y prefirió soltar a Jepkosgei poco antes del kilómetro 40. La victoria era suya pero el récord de la carrera se iba a esfumar.
Finalmente, Assefa cruzó la cinta de meta en la emblemática recta de The Mall con un tiempo de 2:15:50, la segunda mejor marca de la historia en el Maratón de Londres. Jepkosgei, sufriendo, cruzó segunda con un registro de 2:18:44 y Hassan, igualmente extanuada, completó el podio, con 2:19:00.
El nuevo rey del maratón
Por su parte, en la carrera masculina, el keniano Sabastian Sawe, que ya se había impuesto en su debut en un maratón el pasado mes de diciembre en Valencia con 2:02:05, repitió fortuna con otro gran registro (2:02:27), demostrando que puede marcar una época en la distancia más icónica del fondo mundial.
La carrera se presentó más abierta desde la salida, con hasta 10 atletas con marcas personales por debajo de las 2:05. Así las cosas, los primeros 5 kilómetros se pasaron en 14:25, con un numeroso grupo de cabeza en el que estaban todos los favoritos en liza, incluidos Eliud Kipchoge, el debutante y plusmarquista mundial de medio maratón Jacob Kiplimo, el campeón olímpico Tamirat Tola y los vigentes ganadores en Valencia y Berlín Sabastian Sawe y Milkesa Mengesha.
La media maratón, con 10 atletas aún en el grupo delantero, se pasó en 1:01:30, para una proyección final en torno a las 2:03. Al frente, como un tótem casi intocable, marcaba el ritmo el ‘cuarentón’ Kipchoge, que buscaba reverdecer laureles tras sus malos resultados en 2024, aunque el gran mito se descolgaba poco antes del kilómetro 30.
En ese momento, Sawe hizo un demoledor cambio de ritmo con 10 kilómetros aún por delante. Era pronto para saber si su apuesta era la ganadora pero en poco tiempo abrió una brecha de 100 metros a todos sus rivales, con el debutante y corajudo Kiplimo como única alternativa si el etíope desfallecía en los kilómetros finales.
Algo que no sucedió porque Sawe, un enorme talento que pretende ocupar el espacio dejado por el fallecido Kelvin Kiptum, aumentaba incluso su ritmo para acabar imponiéndose con un registro de 2:02:27.
El ugandés Kiplimo confirmaba los buenos pronósticos que le auguraban un buen futuro en el maratón y terminó segundo con 2:03:37 mientras que el keniano Alexander Mutiso, ganador el pasado año, bajó hasta el tercer escalón tras registrar 2:04:20 en la meta. Kipchoge, por su parte, terminó sexto, con 2:05:25, demostrando al mundo que aún puede ser competitivo en un gran maratón.
Tomado de Marca.com/España