En 2001, Tobie Hattfield, diseñador de Nike hizo un viaje a Stanford para conocer a Vin Lanana, un entrenador de atletismo y averiguar cómo sus atletas se habían vuelto tan exitosos. La sorpresiva respuesta: Al ver que todo el equipo de atletas descansaban del entrenamiento al lado de la pista, Hatfield notó que todos estaban descalzos.

El entrenador Lanana tenía la teoría que correr descalzo ofrecía varios beneficios a sus atletas frente a los atletas que corrían con los zapatos tradicionales de running.

Hatfield llevó este descubrimiento de vuelta la casa matriz, perplejo al enterarse que los atletas preferían correr descalzos sobre cualquier otro zapato que les regalaran.

La investigación

Hatfield volvió a Nike Sports Research Lab para determinar exactamente qué sucede cuando un atleta corre descalzo. Un día caluroso a finales de junio de 2001, Hatfield midió la presión del pie de 19 atletas (10 hombres y 9 mujeres) con plantillas pegadas a las plantas del pie y con dos cámaras de alta velocidad capturó imágenes de cada pie en movimiento.

Esto fue lo que encontró: descalzo, el pie aterriza en un ángulo más gradual al suelo que al usar zapatos. Los dedos se flexionan y de agarran. Apenas el talón tiene contacto con el suelo, se crea un balance de presión y progresivamente esta presión se dispersa igualmente a través de todos los músculos de la región metatarsiana pasando por los dedos hasta despegar nuevamente. Con estas diferencias significativas comenzó la carrera parar crear un zapato que replicara estos movimientos naturales.

El desarrollo
Una vez teniendo los estudios, se creó un equipo enfocado únicamente en el desarrollo de un zapato que se asemejar a la sensación de correr descalzo en pasto. Se tuvo que crear una nueva capellada, una que no se enfocara solamente en la forma sino que se pudiera torcer y mover como un pie. El rango de movimiento tenía que ser mayor.

El drop del talón tenía que ser más plano para tener ese aterrizaje neutral. Uno de los descubrimientos más inmediatos fue que para lograr la flexibilidad necesaria, la entre suela no podía ser solo una pieza de espuma. El equipo decidió empezar a cortar las entre suelas en pedazos hasta dar con la cantidad de cortes adecuados y mejorar la flexibilidad general del zapato.

Nike pone al servicio de los runners su tecnología y amor por el running!