Francisco Sanclemente es un deportista paralímpico y conferencista inspirador de 27 años que se ha destacado representando al Valle del Cauca y a Colombia en distintas competencias a nivel nacional e internacional

Pero su historia no empieza aquí:

Francisco nació en Buga, en medio de una familia de escasos recursos económicos, “mi núcleo familiar lo componían mi abuela, mama y dos hermanas menores. Desde niño fui futbolista en selección Buga y selección Valle en las categorías infantil, pre juvenil y juvenil”.

En términos generales llevaba una vida normal, llena de sueños y aspiraciones hasta cuando cumplía sus 18 años mientras se alistaba para probar suerte en las categorías inferiores del Once Caldas de Manizales. A partir de allí todo cambió: Iba a nacer su hija, aun no terminaba su bachillerato, cuando de repente la vida le hace un guiño colocándole en su camino una mielitis crónica (proceso de inflamación crónica de la medula espinal) la cual hace que a partir de allí no vuelva a mover sus piernas.

Este momento de su vida él lo llama la frustración: Francisco relata que los primeros meses de la discapacidad, fueron momentos muy difíciles, llenos de complejos, incertidumbre y muchas lágrimas buscando un porqué a lo que había sucedido. “Hubo momentos en los que pensé que mi vida no valía nada, que no merecía haber nacido e incluso llegue a culpar a Dios, a la vida y a las personas que más quería por lo que me estaba pasando”.

“Después de pasar un año entre médicos, clínicas, exámenes y cirugías; un día, mientras veía mi hija como cumplía su primer año, pensé en cómo estaré yo cuando ella cumpliera sus 10, 15 y 20 años, que iba a enseñarle y que ejemplo le podía dar, inmediatamente se me encharcaron los ojos. Sentí que había tocado fondo y que tenía que hacer algo para que mi hija, no creciera viendo un papá lleno de frustraciones que no agregaban valor a su vida, sentí que tenía hacer algo y fue así como tome una de las decisiones más importantes de mi vida: Terminar mi bachillerato”

Ese momento se llama aceptación: Cuando volvió al colegio en el 2007 no solo empezó a ver la discapacidad de una forma diferente, sino que también sentía que cada día se resignaba menos a esa posición de frustración en la que lo había puesto su discapacidad. Cada día quería aprender más, moverse más y hacer cosas diferentes. Fue así como dañó 3 sillas de ruedas recorriendo las calles de su barrio Santa Bárbara para terminar su bachillerato.

En el 2008 se matriculó en la universidad para estudiar Administración de Empresas e ingresó a realizar su fisioterapia porque se encontraba en estado de obesidad, proyectos en los cuales lo acompañó toda su familia y amigos.

“Cada 5 metros que recorría rumbo a la universidad o a la fisioterapia sorteaba los huecos en su camino, las rampas que parecían premios de montaña y, como si fuera poco, también tenía que ver personas que le miraban con expresión de lastima, tristeza e incluso algunas que se acercaban a hacer comentarios que lo inducían a una posición de víctima. “Recuerdo un día acercarse alguien a decirme que si hubiera quedado en mi posición se habría suicidado”.

Sin embargo cada que los escuchaba tomaba la decisión de seguir adelante y de hacer cosas que hicieran que mi limitación física, pasara a un segundo plano: había aceptado lo que no podía cambiar, pero también había descubierto que podía crear una nueva realidad, “quería ser profesional y hacer algo de lo que mi hija se sintiera orgullosa; ella fue mi inspiración para ir cada día a la universidad y a la fisioterapia, donde no solo aprendía a desenvolverme en cualquier espacio, sino que también rehabilitaba mi mente. Entre la universidad, la fisioterapia y mis quehaceres como padre, iba forjando características que nunca me imaginé tener cuando caminaba:

Tenía más templanza, disciplina, perseverancia y estaba dispuesto a recobrar un sueño que sentí esfumado cuando llego la silla de ruedas.: Ser deportista.

Fue así como en enero del 2010 mientras veía televisión y apareció un anuncio de la media maratón de Bogotá, inmediatamente apagó el televisor y dijo: “quiero estar allá” y aquel camino que inició al volver al colegio, ir a la universidad, la fisioterapia y después la actividad física, se había convertido nuevamente en una vocación, puesto que no solo fue la media maratón de Bogotá, sino que el sueño continuó con la Media Maratón de Cali, Maratón de las Flores Medellín, Carrera Presta tu pierna, Maratón de Ciudad de México, y Maratón de Buenos Aires. En todas ellas ocupando grandes resultados para el Valle del Cauca y para Colombia.

En este 2016 estará corriendo el IRON MAN en Cartagena, así como el Maratón de Mar del Plata en Argentina, Ciudad de México así como las grandes carreras en Colombia.

Paso de correr con las piernas jugando fútbol en mi ciudad, a correr con las manos en las maratones más importantes del mundo.

El conferencista

Francisco más allá de contar su historia de vida, la cual de por sí ya es inspiradora, también imparte conferencias de auto liderazgo, automotivación y disciplina, motivando las personas a reinventarse y sacar el mejor provecho de las situaciones que se presentan en el día a día.

Francisco Sanclemente ConferencistaÉl dice que de nada valen los logros si no puedes transmitir todo lo que has aprendido a los demás, pues no se trata solo de entrenar, competir y tener buenos resultados, sino también de dejar una huella que pueda ayudar a alguien a ser mejor

Francisco a su experiencia de vida e historia de superación, le ha añadido su formación como Administrador de Empresas y ha hecho diplomados en Pedagogía, Coaching y Marketing, lo que le ha permitido llevar su mensaje a distintas parte del país y para importantes empresas a nivel nacional como SAP, Grupo Argos, Epm y Oikos Storage.

Dentro de su portafolio de conferencias encontramos la conferencia Reinventarse, la cual se desarrolla un estilo dinámico, realista y divertido, que cambia contundentemente el lente con el que se miran los problemas y las dificultades. Inspirando el mejoramiento continuo, gestión emocional, autodisciplina y auto motivación, que repercuten en el trabajo en equipo, compromiso, clima laboral y a su vez conducen a cumplir con los objetivos trazados a nivel personal y empresarial.

Francisco dice que la sociedad y las organizaciones necesitan personas Inspiradas, Apasionadas y comprometidas, que sean capaces de marcar la diferencia y, que desde sus quehaceres, logren lo que otros encuentran sus deberes.

Francisco Sanclemente

Cel.3165444538

@FranciscoSancle