Por: Francisco Sanclemente

Mi nombre es Francisco Sanclemente, tengo 27 años y vivo en Buga, Valle del Cauca.  Soy atleta en silla de ruedas, corro distancias de 10, 21 y 42 km.

Pero todo no inicia aquí; de niño fui futbolista y representé al Valle del Cauca en algunos campeonatos a nivel nacional en las categorías pre-juvenil y juvenil. Cuando tenía 18 años una circunstancia marco mi vida para siempre, una mielitis hacía que no pudiera volver utilizar mis piernas para caminar.

Desde allí todo fue diferente, los sueños idealizados se iban al suelo pues no había terminado mi colegio, venía una hija en camino y el fútbol que era mi pasión, ya no lo volvería a disfrutar desde adentro del campo.

Así empecé a usar una silla de ruedas y con ella vinieron las secuelas psicológicas y sociales que normalmente enmarcan una discapacidad en Colombia.   Pasé varios años entre clínicas, médicos y fisioterapia donde no solo aceptaba mis circunstancias, sino que rehabilitaba mi mente y mi espíritu para lo que habría de venir.

Después de 5 años de usar la silla había terminado mi bachillerato y cursaba octavo semestre de administración de empresas.  Recorría todos los días 3 kilómetros para llegar a la universidad y uno más para llegar a la terapia, en total hacia entre 10 y 11 kilómetros en un día, pues mi mama también me ponía hacer los mandados.

Por esos días, aparecía un anuncio en televisión donde se promocionaba la Media Maratón de Bogotá, el aviso no pasó desapercibido para mí e ingrese al Internet para averiguar de qué se trataba, pues siempre me han llamado la atención los actos heroicos.  Entré y vi que había una categoría para discapacidad y justamente era de 10k, un kilómetro menos de los que yo hacía en mis actividades, «Posiblemente pueda ganar » así lo pensé decidí asistir.

Con el apoyo de amigos, familiares y recursos propios pude asistir a mi primera Media Maratón de Bogotá.  Ese día fue uno de los más difíciles de mi vida, pues no me imaginaba los puentes y mucho menos lo competitivos que eran los atletas en silla de ruedas.. Me demore 1 hora y 20 minutos en terminar mi primera media maratón ocupando casi que la última posición, pero al llegar y ver lo que te dicen y como te animan, me olvidé que era de los últimos y aceleré como si fuera el primero…

Así empezó mi carrera deportiva, después de allí solo quería mejorar y participar en carreras.  Empecé a buscar patrocinadores porque sabía que necesitaba mejorar mi  silla, así fue como después de tanto buscar y con la ayuda de amigos uno y el patrocinio de los supermercados más importantes del Valle (Tiendas Cañaveral) pude conseguir una silla de atletismo.

En el 2012 me inscribí en la Media Maratón de Cali y en la Media Maratón de Bogotá y ya no era el último.  En en Cali fui cuarto y en Bogotá doce, veía que poco a poco mejoraba y afrontaba nuevos retos en mi carrera deportiva.  Ese año pasaba de 2 a 7 carreras en el año, y no paraba allí, sino que ya era segundo en la carrera Presta tu pierna y podio en la Media Maratón de Cali y Maratón de las Flores.

Había descubierto que el running había cambiado mi vida, y entre lágrimas y alegrías me esfuerzo todos los días para ser mejor y gracias a ello, he forjado un espíritu mucho más firme, templado y disciplinado de lo que había sido cuando aún usaba las piernas para caminar.

En el 2013 y después de buscar en muchas empresas, llegaba BBVA a mi carrera deportiva, una empresa que creyó en mi carrera y facilito las cosas para que asistiera a mi primera Maratón de Buenos Aires donde ocupé la quinta posición con un tiempo de 2 horas 30 minutos.  Era un sueño hecho realidad que vi imposible cuando caminaba y se convertido en algo posible y alcanzable ya usando una silla de ruedas, ese día no puedo evitar las lágrimas al cruzar la meta, lo había logrado y sabía que para correr un maratón hay que recorrer primero mucho más que 42 km, como no iba a estar feliz…

El 2014 tuve los primeros grandes obstáculos en mi carrera, me había lesionado el deltoides derecho y serían 4 meses de recuperación.  Era la primera vez que internalizaba en mi vida la frase que tanto se utiliza hoy en día: «Amor por lo que haces» así la catalogué y cada día de recuperación y con el apoyo de mi familia, amigos y compañeros pensaba en que volvería hacerlo y que me tenía que sostener para luchar por lo quería lograr.

Al final del 2014 volví a competir y lo hice mejor que nunca: Gané mi primera Maratón de las Flores, 10k de la luz y 10k de Bodytech en Cali.  Para el 2015 las bendiciones han continuado, aun cuento con el apoyo de BBVA al cual se sumó EPM y Grupo Argos y he tenido la oportunidad de ganar la carrera Presta tu Pierna, Media Maratón de Cali, Maratón de las Flores, y ocupar el quinto puesto en el Maratón de Ciudad de México y Maratón de Buenos Aires.

Hoy en día cuando corro un maratón, voy recordando todo lo que he vivido para estar donde estoy, recuerdo cada entreno, cada madrugada, esos días donde te duelen hasta los ojos después de entrenar… Todo esto para decir al final: Ha valido la pena y seguirá valiendo la pena.  No ha sido un camino fácil, hay muchas carreras que me ha tocado cancelar, pero todo eso me ha servido para trabajar con más pundonor y llegar algún día a convertirme en un atleta paralímpico de élite mundial.

Contacto: franciscosanclemente@serinspiracion.com